La braquioplastia, también conocida como lifting de brazos, es una cirugía plástica que tiene como objetivo mejorar el contorno de los brazos eliminando el exceso de piel y grasa que cuelga, especialmente después de una pérdida de peso significativa o debido al envejecimiento.
Si estás considerando este procedimiento, en el blog de hoy te contamos todo lo que necesitas saber.
Contenido
¿Qué es la braquioplastia y cuándo se recomienda?
La braquioplastia es un procedimiento quirúrgico diseñado para eliminar el exceso de piel y grasa de la parte superior de los brazos, proporcionando una apariencia más tonificada y definida.
Se recomienda para personas que han perdido una cantidad considerable de peso o que experimentan flacidez en los brazos.
A menudo, la piel pierde elasticidad con el tiempo, lo que genera que el brazo adquiera un aspecto colgante, comúnmente denominado «alas de murciélago». Este procedimiento mejora tanto la estética como la confianza del paciente.
¿Cómo se realiza el procedimiento?
La cirugía de braquioplastia se realiza bajo anestesia general. Realizamos una incisión en la parte interna o posterior del brazo, desde la axila hasta el codo, dependiendo de la cantidad de piel que se deba eliminar.
A través de esta incisión, se extirpa el exceso de piel y grasa, y la piel restante se tensa para crear un contorno más definido.
En algunos casos, también se puede utilizar liposucción para eliminar depósitos de grasa adicionales. La duración del procedimiento suele oscilar en torno a las dos a tres horas.
¿Qué esperar durante la recuperación?
La recuperación de una braquioplastia puede llevar algunas semanas. Es común experimentar hinchazón y algo de malestar en los días posteriores a la cirugía.
La mayoría de los pacientes pueden volver a sus actividades diarias normales después de una o dos semanas, aunque se recomienda evitar levantar peso o realizar ejercicios intensos durante al menos seis semanas.
Las cicatrices, aunque visibles al principio, se atenúan con el tiempo y se pueden tratar con terapias específicas para mejorar su apariencia.
¿Quiénes son los candidatos ideales para una braquioplastia?
Los candidatos ideales para una braquioplastia son aquellos que tienen una cantidad significativa de piel flácida en los brazos debido a la pérdida de peso o al envejecimiento natural.
Es importante que los pacientes tengan un peso relativamente estable, ya que las fluctuaciones significativas podrían afectar los resultados a largo plazo.
Además, los mejores candidatos son personas que no fuman o que están dispuestas a dejar de fumar antes y después de la cirugía, ya que el tabaco puede afectar la cicatrización y aumentar el riesgo de complicaciones.
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Si estás considerando una braquioplastia, te invitamos a que solicites tu primera consulta personalizada.
Ya sea de forma presencial o por videoconferencia, durante la cita evaluaremos detalladamente tu caso para ofrecerte un plan de tratamiento adaptado a tus necesidades y objetivos.
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