Tratamientos para tu piel en Madrid

Muchas son las consultas que recibo en mi consultorio de Madrid por parte de personas que desean saber de tratamientos para mejorar el aspecto de su piel por varios motivos.

El abanico de posibilidades es amplio, ya que hay distintos tratamientos para la piel dependiendo de cada caso en particular.

Lo más recomendable, es que acudas a consulta en la cual de forma personalizada trataré tu caso en particular para así escoger el tratamiento que mejor se adecúe a tus necesidades.

Contenido

Distintas causas para una piel imperfecta

Hay muchos factores que provocan una serie de cambios en la piel de nuestro rostro que hace que aparezca sin brillo, con arrugas, seca, sin vitalidad y con manchas. Entre ellos podemos mencionar los siguientes:

El sol.
El tabaco.
La falta de hidratación adecuada.
Los embarazos.
Los anticonceptivos orales.
El uso de maquillaje y otros cosméticos.

Además de evitar estos factores nocivos, disponemos desde el punto de vista médico, de múltiples tratamientos que ayudan a prevenir y tratar todo este deterioro de la piel mejorando su aspecto para que esté hidratada, luminosa y rejuvenecida, atenuando o eliminando las manchas.

Dejando a un lado el tratamiento específico de las arrugas de expresión por medio de Neurotoxina (Neuromodulador) y rellenos de ácido hialurónico e hidroxiapatita cálcica, así como la restauración de volumen en mejillas y reafirmación de la línea de la mandíbula para mantener el óvalo facial.

Lo mejor es combinar tratamientos para tu piel

Es muy frecuente que al venir a mi consultorio en Madrid las mujeres me pregunten sobre cuál es el mejor de los tratamientos y lo cierto es que ningún tratamiento para la piel cumple todos los requisitos para ser único.

La combinación de ellos según las necesidades individuales es lo que hace que podamos obtener unos resultados óptimos.

No debemos olvidarnos que unos cuidados básicos diarios y unos hábitos saludables son el pilar fundamental del cuidado de la piel.
Nota de interés

Conoce los 2 tratamientos para la piel más demandados en la actualidad

1. Peeling químico

Es un tratamiento no quirúrgico encaminado a corregir diferentes aspectos de la piel, mediante la utilización de agentes exfoliantes.

Se eliminan capas superficiales de la piel (epidermis y dermis superficial) mediante la aplicación de diferentes tipos de ácidos. Posteriormente, se produce una regeneración de la matriz dérmica.

El nivel de «pelado» (peeling) depende de la profundidad que alcancemos en la piel por lo que es necesario realizar varios peelings separados 2 a 4 semanas entre ellos para unos resultados más satisfactorios.

Entre sesión y sesión los pacientes deben realizar unos cuidados mínimos mediante la utilización de cremas de protección solar y otras con principios activos que van preparando la piel para el próximo peeling.

En ocasiones, en pieles muy dañadas, es necesario realizar un peeling de mayor profundidad. En estos casos hay que advertir a los pacientes sobre las posibles limitaciones de su actividad social durante varios días.

Nota de interés

En los meses más soleados no se recomienda la realización de peelings por el riesgo de que se produzcan hiperpigmentaciones (manchas).

2. Mesoterapia facial

La mesoterapia consiste en la inyección de diferentes sustancias a nivel dérmico para mejorar el aspecto. Se realiza el depósito en el nivel de profundidad que queremos que actúen.

La técnica se realiza mediante múltiples punciones con jeringa y agujas muy finas o mediante dispositivos provistos de varias agujas y producen múltiples punciones por segundo. De esta forma se produce un doble efecto:

El que producen las sustancias que inyectamos.
El estímulo de producción de colágeno que se produce por las punciones.

Las sustancias que se inyectan o skinboosters (tratamiento de microinyecciones en la piel profunda) se componen fundamentalmente de ácido hialurónico de baja densidad, vitaminas, aminoácidos y minerales. Su misión no es rellenar las arrugas sino hidratar y nutrir la piel consiguiendo un rejuvenecimiento de la misma.

También se puede utilizar plasma rico en plaquetas (PRP). En este caso, lo que inyectamos es un compuesto que se extrae de la sangre del propio paciente, se procesa y obtenemos plasma enriquecido con factores que actúan en la piel.